Qué producto usar en cada caso

La curación de una herida requiere el uso correcto de los materiales de primeros auxilios. Aquí te proporcionamos una guía rápida sobre cuándo usar apósitos, gasas y tiritas:

• Apósitos: Los apósitos son muy útiles cuando necesitas cubrir y proteger una herida para evitar la infección y permitir una curación adecuada. Su capacidad para adherirse a la piel los convierte en una opción excelente para cubrir heridas que pueden ser expuestas a bacterias o suciedad, como las heridas postoperatorias, las úlceras o las quemaduras. Además, los apósitos modernos, como los apósitos hidrocoloides, incluso pueden ayudar a mantener un ambiente húmedo para una curación más rápida y efectiva.
• Gasas: Las gasas son un material versátil que se utiliza para diversas tareas de curación. Son excelentes para limpiar la herida, aplicar medicación y absorber cualquier exceso de líquido. Las gasas estériles son útiles en el manejo de heridas abiertas que están sangrando, ya que pueden ayudar a controlar el sangrado mientras protegen la herida. También son útiles para heridas que no requieren un apósito adhesivo, como las quemaduras menores o las abrasiones.
• Tiritas®: Las Tiritas® son una opción rápida y fácil para tratar cortes y raspaduras menores. Son perfectas para heridas que son relativamente pequeñas y no están en áreas de alta fricción. Las Tiritas® son adhesivas, por lo que proporcionan una barrera contra la suciedad y las bacterias, y la parte central, que es la que entra en contacto con la herida, está diseñada para no pegarse a la herida, evitando así un daño adicional al retirarla.

Elegir el producto adecuado depende del tipo de herida, su tamaño y su ubicación. Siempre es mejor tener una variedad de estos materiales de primeros auxilios a mano para poder reaccionar adecuadamente en cualquier situación.