Hipotensión. Cuáles son sus causas, síntomas y tratamiento.

La hipotensión es un término que se utiliza para hacer referencia a la presión arterial baja, es decir, por debajo de los valores considerados normales. La hipotensión se produce por diversas causas, por lo que el tratamiento varía en función de la causa que la origina
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¿Qué es la hipotensión?

La hipotensión sucede cuando la presión arterial es mucho más baja que los valores considerados normales. Cuando la tensión sistólica es inferior a 90 mmHg o la tensión diastólica inferior a 60 mmHg se considera hipotensión.

Esto supone que el corazón, el cerebro y otras partes del cuerpo no reciban suficiente sangre.

Podemos diferenciar entre tres tipos de hipotensión:

• Hipotensión ortostática: se produce por un cambio súbito de la posición del cuerpo. Por ejemplo, al levantarse demasiado rápido. En estos casos, la presión arterial baja, pero se recupera rápidamente en segundos o minutos.


• Hipotensión mediada neuralmente (HMN): ocurre cuando una persona permanece de pie durante mucho tiempo. Este tipo de hipotensión suele ocurrir más frecuentemente entre niños y jóvenes. Parece ocurrir debido a una falta de comunicación entre el corazón y el cerebro.


• Hipotensión posprandial: esta bajada de la presión arterial se produce una o dos horas después de comer y afecta sobre todo a los adultos mayores. Durante la digestión, la sangre fluye al tracto digestivo y, normalmente, el cuerpo aumenta la frecuencia cardíaca y constriñe los vasos sanguíneos para contribuir a mantener la presión arterial normal. Pero, este mecanismo falla en algunas personas, provocando la hipotensión.

Causas de la hipotensión

Existen diferentes causas que pueden producir hipotensión. Entre ellas destacamos:

1. Embarazo

Durante el embarazo, el sistema circulatorio se expande rápidamente, por lo que es posible que la presión arterial disminuya. Después del embarazo, los niveles vuelven a la normalidad.

2. Falta de nutrientes

La falta de ciertos nutrientes en la dieta, como la vitamina B-12, el folato y el hierro, puede provocar que el cuerpo no produzca los suficientes glóbulos rojos, lo que se denomina anemia. Esta afección puede, a su vez, provocar una baja presión arterial.

3. Problemas cardíacos

Algunas enfermedades cardíacas, como frecuencia cardíaca baja (bradicardia), problemas de la válvula cardíaca, ataque cardíaco o insuficiencia cardíaca, pueden provocar hipotensión.

4. Pérdida de sangre

Las pérdidas de sangre que se producen debido a una lesión grave o una hemorragia interna pueden provocar hipotensión, ya que se reduce la cantidad de sangre que hay en el cuerpo.

5. Problemas endocrinos

La insuficiencia renal, un nivel bajo de glucosa o la enfermedad paratiroidea, entre otras, pueden causar hipotensión.

6. Deshidratación

La deshidratación que produce la fiebre, los vómitos, un cuadro diarreico grave, el consumo de alcohol, una sudoración excesiva o un consumo elevado de diuréticos, puede provocar una caída de la tensión.

7. Ciertos medicamentos

Algunos medicamentos, como ansiolíticos, antidepresivos, diuréticos, medicamentos para tratar la disfunción eréctil o los que ayudan a tratar la hipertensión, pueden causar tensión arterial baja.

8. Temperatura ambiental

Una elevada temperatura también aumenta el riesgo de sufrir una bajada de la tensión arterial.

Síntomas de la hipotensión

La hipotensión se suele manifestar con los siguientes síntomas:

• Mareos o aturdimiento
• Visión borrosa
• Náuseas
• Fatiga o somnolencia
• Desmayo

Pero para saber con más certeza si padeces hipotensión, puedes medir la presión arterial con Veroval® Tensiómetro de Brazo.
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Cómo tratar la hipotensión

Las causas de la hipotensión son muy diversas, por lo que el tratamiento de la presión arterial baja variará en función de lo que la haya originado. Pero estas son algunas de las recomendaciones generales para paliar los síntomas:

• Consumir más sal en la dieta
• Beber más agua
• Ciertos medicamentos para subir la presión arterial
• Usar medias de compresión

En cualquier caso, siempre es aconsejable acudir a un médico para que realice un diagnóstico apropiado y prescriba el tratamiento necesario.