Tensión arterial
Qué es un ictus. Cómo detectarlo y prevenirlo
En España mueren 40.000 personas al año a causa de un ictus.Es la primera causa de muerte en mujeres y la segunda en varones, según la Federación Española de Ictus. Las claves principales para no sufrir un ictus o para que después de sufrirlo haya un buen pronóstico son la prevención y la detección precoz.
Ictus: Detección y prevención
Las 3 claves del ictus: prevención, detección y rapidez
En España mueren 40.000 personas al año a causa de un ictus. Es la primera causa de muerte en mujeres y la segunda en varones, según la Federación Española de Ictus. Las claves principales para no sufrir un ictus o para que después de sufrirlo haya un buen pronóstico son la prevención y la detección precoz.
Factores de riesgo en el ictus
Existen factores que pueden favorecer el riesgo de sufrir un ictus. Podemos dividirlos en dos grupos.
Factores de riesgo modificables
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Hipertensión arterial
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Arritmias no tratadas
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Sobrepeso
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Sedentarismo
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Consumo elevado de alcohol
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Consumo de tabaco
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Consumo de drogas
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Diabetes
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Tratamientos hormonales
Factores de riesgo no modificables
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Edad
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Presencia de aneurismas cerebrales
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Haber padecido un ictus previo
Hipertensión
La hipertensión se considera el principal factor de riesgo modificable de sufrir un ictus. La presión arterial debería situarse por debajo de los valores de 140 mm Hg y 90 mm Hg. Por encima de estas cifras, el riesgo de padecer un ictus se incrementa de forma paralela al aumento de la presión arterial.
El problema de la hipertensión es que, en la mayoría de ocasiones, no presenta síntomas. Así que es difícil identificar que se está padeciendo, a no ser que se mida la presión arterial de forma periódica. Por este motivo, a la hipertensión se le denomina “el asesino silencioso”, porque no siempre presenta síntomas, pero las consecuencias para la salud pueden ser graves.
Por este motivo, es importante realizar controles rutinarios, especialmente en aquellas personas que también padezcan otros factores de riesgo que favorezcan sufrir un ictus. Se pueden realizar controles de la presión arterial de forma rápida y profesional en una farmacia. Otra opción es medir la presión en casa con un tensiómetro como puede ser Veroval®DuoControl de forma regular.
Arritmias
Las arritmias son otro factor de riesgo muy determinante a la hora de sufrir un ictus. Es debido a que favorecen la aparición de pequeños coágulos que, bombeados desde el corazón hasta el cerebro, provocan el ictus embólico. Se calcula que al menos 2 de cada 10 ictus se deben a la presencia de una arritmia, la más frecuente de las cuales es la fibrilación auricular.
Por este motivo, también es muy importante el tratamiento de las arritmias. Un profesional médico puede prescribir el uso de coagulantes en estos pacientes para prevenir los ictus.
Detección del ictus
Se calcula que, por cada minuto el que la circulación de la sangre en el cerebro está restringida, se pierden 1,9 millones de neuronas y 14 billones de conexiones neuronales. Por eso, cuando hablamos de ictus, el tiempo es vida. Cuanto más rápido se actúe, mejor pronóstico tendrá el paciente.
Para poder actuar con rapidez, se ha de saber detectar los síntomas de un ictus. Se debería activar la alarma ante la aparición brusca de los siguientes síntomas:
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Dolor de cabeza
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Afectación de la visión en uno o ambos ojos.
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Aparición de problemas en el habla, que pueden o no ir acompañados de problemas para entender lo que se le dice.
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Pérdida de la fuerza en uno de los brazos o piernas o en ambos.
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Pérdida de la capacidad para mantener el equilibrio o la estabilidad.
Ante la aparición de estos síntomas, se debe llamar inmediatamente al 112. No hay que trasladar al enfermo por medios propios al hospital o centro de salud, ya que un medio de transporte adecuado con atención médica desde el primer momento, maximiza las posibilidades de recuperación del accidentado.
Así que podemos concluir que frente a un ictus hay dos factores claves muy importantes: la detección temprana de los síntomas y actuar con rapidez.
Prevención del ictus
La prevención también es otro factor clave frente al ictus. La Federación Española de Ictus sostiene en un 80% de los casos, el ictus se puede evitar si se controlan los factores de riesgo. Para reducir estos factores, los expertos aconsejan:
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Controlar la presión arterial alta (hipertensión).
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Llevar una dieta saludable, reduciendo la ingesta de grasas saturadas.
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Mantener un peso saludable.
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No fumar.
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Controlar la diabetes.
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Hacer ejercicio de forma regular.
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Reducir el consumo de alcohol.
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