Tensión arterial
Qué son las arritmias. Causas y tratamiento
Las arritmias son latidos del corazón irregulares. Las causas son variadas y, aunque muchas veces no son graves, se debe acudir a un especialista.
Arritmias : Causas y tratamientos
Qué son las arritmias: Tipos, causas y tratamientos
¿Qué son las arritmias?
Una arritmia cardíaca es un latido irregular del corazón. Se produce cuando los impulsos eléctricos que coordinan los latidos del corazón no funcionan correctamente.
El ritmo cardíaco se divide en dos fases: la diástole, cuando el músculo se relaja y se llena la cavidad de sangre, y la sístole, cuando el músculo se contrae y expulsa la sangre. Este proceso se produce de manera rítmica gracias a un sistema eléctrico. Cuando este sistema se altera por diversos motivos, es cuando aparecen las arritmias.
Tipos de arritmias
Podemos diferenciar, principalmente, entre tres tipos de arritmia.
Taquicardia
La taquicardia hace referencia a un ritmo cardíaco acelerado, generalmente de más de 100 latidos por minuto. El corazón de los adultos en reposo suele latir entre 60 y 100 veces por minuto. Para saber las pulsaciones por minuto del corazón, será necesario recurrir a un monitor portátil del ritmo cardíaco (ECG), como Veroval® ECG.
Pero, una frecuencia cardíaca rápida no siempre es un problema de salud. Por ejemplo, una frecuencia cardíaca acelerada también se produce al hacer ejercicio o cuando se padece estrés.
Es posible que la taquicardia no conlleve complicaciones. Sin embargo, un ritmo cardíaco acelerado de forma constante o permanente en el tiempo, produce que el corazón no puede bombear sangre con oxígeno a todo el cuerpo de manera eficiente. Por eso, es necesario consultarlo siempre con un médico, ya que existen tipos de taquicardia que pueden provocar problemas de salud graves, como insuficiencia cardíaca, problemas cardiovasculares o muerte cardíaca repentina.
Bradicardia
La bradicardia es una frecuencia cardíaca más lenta de lo normal, a menos de 60 veces por minuto. El corazón de los adultos en reposo suele latir entre 60 y 100 veces por minuto.
Al igual que sucede con la taquicardia, un ritmo cardíaco bajo no siempre es preocupante. Por ejemplo, adultos jóvenes y deportistas pueden tener una frecuencia cardíaca de menos de 60 latidos por minutos en reposo o durante el sueño. De todas formas, si esta frecuencia se mantiene de forma general, es necesario acudir a un especialista, ya que el corazón no puede bombear suficiente sangre rica en oxígeno al cuerpo.
Latidos cardíacos prematuros
Otro tipo de arritmias son los latidos cardíacos prematuros. Es decir, latidos adicionales. Ocurren cuando el corazón late antes de lo que debería, interrumpiendo así el ritmo cardíaco regular. Si no se padece de problemas cardíacos, estos latidos no son preocupantes. La mayoría de personas lo experimentan en alguna ocasión, por ejemplo, por un consumo elevado de cafeína, de alcohol o por estrés. Pero sería recomendable acudir al médico para que diagnostique cuál es la causa de esta afección.
Causas de las arritmias
Las causas de las arritmias pueden ser muy variadas, pero algunos de los factores principales serían los siguientes:
- Ataque cardíaco
- Ataque cardíaco pasado que pueda haber dañado el miocardio
- Arterias obstruidas en el corazón
- Insuficiencia cardíaca o agrandamiento del corazón
- Enfermedad cardíaca congénita (que esté presente al nacer)
- Presión arterial alta
- Diabetes
- Hipertiroidismo
- Hipotiroidismo
- Apnea del sueño
- Ciertos medicamentos, como los del resfriado o alergia
- Consumo de drogas
- Fumar
- Estrés o ansiedad
Síntomas de las arritmias
Es posible que las arritmias no provoquen ningún síntoma y que se detecten únicamente mediante la auscultación cardíaca de un médico. Pero si presentan síntomas, estos son los más comunes:
- Latidos cardíacos acelerados en el caso de la taquicardia
- Latidos cardíacos lentos en el caso de la bradicardia
- Aleteo en el pecho
- Dolor en el pecho
- Falta de aliento
- Fatiga
- Mareos
- Desmayo
Tratamientos de las arritmias
El tratamiento de las arritmias dependerá de la causa que las origine, así como del tipo de arritmia de la que se trate. En función de la gravedad, el médico decidirá si es necesario prescribir algún tratamiento o no. Algunos de estos tratamientos pueden incluir fármacos o incluso cirugía.
También existen unas recomendaciones generales para reducir el riesgo de sufrir arritmias:
- Hacer ejercicio regularmente
- Seguir una dieta saludable
- No fumar
- Limitar el consumo de alcohol
- Limitar el consumo de cafeína
- Reducir el estrés
En definitiva, las arritmias cardíacas, a pesar de ser comunes, no deben ser tomadas a la ligera. La importancia de entender los síntomas y las causas es clave para identificarlas y tratarlas a tiempo, evitando así posibles complicaciones graves.
Así que, si tienes alguna duda o sospechas que puedes estar experimentando una arritmia, no esperes más y consulta a un especialista.