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Goteo post-miccional: causas y tratamientos

El goteo después de orinar, o goteo post-miccional, es una leve pérdida de orina en forma de gotas que ocurre unos segundos después de terminar de orinar, cuando ya se ha colocado de nuevo la ropa interior.

Hombre mayor con goteo de orina

Casuas y tratamientos

El goteo post-miccional es mucho más común en hombres que en mujeres, a causa de las características anatómicas de su uretra. Ocurre porque queda una pequeña cantidad de orina remanente en la zona superior de la uretra (uretra bulbar o prostática). No se debe a problemas con la vejiga, sino que suele estar relacionado con una debilidad en los músculos del suelo pélvico, y hay que diferenciarlo del goteo terminal, que ocurre al finalizar la micción con un goteo rápido. Por el contrario, la mayoría de hombres explican el goteo post-miccional como “se me escapan gotas de orina” en los minutos posteriores a ir al baño.

El goteo después de orinar afecta a aproximadamente el 12% de los hombres, y su prevalencia aumenta con la edad.

¿Por qué ocurre el goteo post-miccional?

El goteo post-miccional ocurre principalmente por una debilidad en los músculos del suelo pélvico, que rodean la uretra, así como a posibles problemas en el esfínter uretral externo.

El suelo pélvico es un grupo de músculos que se encuentran en la base de la pelvis, dando soporte principalmente al área urogenital y anal. Es el encargado, entre otras cosas, de interactuar con los esfínteres urinarios para favorecer la salida de la orina y aumentar el tono de la uretra para eliminar la orina residual. Factores como la obesidad, el daño neurológico, ciertas complicaciones quirúrgicas, la edad, o incluso el levantamiento de pesos, favorecen este daño en la musculatura del sueño pélvico.

Por otro lado, el esfínter uretral externo es el que se encuentra al final de la uretra, en el extremo del pene. Este esfínter se contrae al terminar de orinar, devolviendo la orina remanente a la vejiga. Si este esfínter no se contrae adecuadamente, puede resultar en una pérdida de orina en forma de gotas en los minutos siguientes.

¿Cómo evitar el goteo post-miccional?

En caso de padecer de goteo después de orinar, se pueden realizar algunas acciones para reducir las molestias ocasionadas:

  • Masaje de uretra bulbar. Es una técnica de autoayuda que consiste en aplicar una presión suave con las yemas de los dedos en el área tras el escroto, en la base bajo los testículos, para ayudar a expulsar las últimas gotas de orina de la uretra inmediatamente después de orinar.
  • Esperar unos segundos después de orinar. Esperar a retirarse del baño al terminar la micción puede ayudar a asegurarse un completo vaciado de la orina residual antes de subirse la ropa interior.
  • No orinar con demasiada frecuencia. Aguantar las ganas de orinar un poco más puede ayudar a un vaciado más completo de la vejiga urinaria, reduciendo el riesgo de goteo post-miccional.

Por otro lado, una solución a largo plazo implica el refortalecimiento de la musculatura pélvica:

  • Ejercicios de suelo pélvico. El entrenamiento de la musculatura del suelo pélvico es el único método que permite mejorar el goteo post-miccional, aunque sus efectos pueden tardar entre 3 y 6 meses en ser evidentes. Se trata de practicar ejercicios de Kegel, contracciones voluntarias y dirigidas de la musculatura del suelo pélvico con el objetivo de tonificarla.

¿Cuándo acudir a un especialista por goteo post-miccional?

El goteo post-miccional es un problema muy habitual en hombres de todas las edades, aunque su frecuencia aumenta con la edad. No se trata de un problema de salud mayor, aunque sí puede conllevar molestias en la vida diaria y personal. Mantener un suelo pélvico tonificado y cuidar los hábitos de salud, especialmente los relacionados con mantener un peso adecuado, ayudará a evitarlo.


No obstante, es importante conocer cuándo el goteo post-miccional puede ser una señal de un problema mayor que requiera atención médica. Por eso, se debe solicitar una consulta médica si aparece también alguno de estos signos:

  • Dificultades para iniciar la micción.
  • Flujo miccional (flujo de orina) débil o intermitente.
  • Se requiere esfuerzo para orinar.
  • Sensación de vaciado incompleto de la orina.
  • Sangrado al orinar, o pequeñas cantidades de sangre en la orina (puede verse como la orina de color rosado).
  • Dolor o ardor al orinar.
  • Pérdidas de orina que no ocurren después de la micción, sino en cualquier otro momento del día.

 

En resumen, el goteo post-miccional, o goteo después de orinar, es un problema que aparece de forma habitual en hombres y que, aunque normalmente no se relaciona con una enfermedad concreta, sí depende de la fortaleza del suelo pélvico y otras estructuras urinarias. En caso de padecer este problema, mientras se busca una solución a largo plazo, puede recurrir a utilizar un absorbente para pérdidas leves de orina, cómodo y discreto: Lindor® Men Normal 2 gotas.


Finalmente, le recordamos la importancia de consultar con el médico si se sospecha de problemas urinarios o existen antecedentes personales o familiares, así como acudir a las revisiones periódicas con el urólogo, especialmente a partir de los 50 años.